El Olympique Lyonnais, quinto equipo francés que se cruza en el camino del EuroBetis
El Real Betis Balompié inaugura el próxima jueves una nueva andadura por tierras europeas, tras obtener el pasaporte para la fase de grupos de la Europa League. Los verdiblancos inician la travesía ante el Olympique Lyonnais, enfrentamiento hasta ahora inédito en competiciones continentales. Nunca en la centenaria historia de la entidad heliopolitana se ha producido una batalla entre ambos equipos, por lo que el duelo ante los 'leones' franceses supondrá la primera lucha para los de Mel ante una de las entidades más populares de Francia, un equipo capaz de pulverizar récords en la Ligue 1, donde se hizo con el máximo entorchado, el título liguero, siete veces consecutivas, en el período transcurrido entre 2002 y 2009.
El doble partido ante el bloque de Rémi Garde que tendrá el cuadro bético no será la primera ocasión en la que el fútbol francés aparezca en el camino europeo del Real Betis, una experiencia abierta por el Stade Français FC en la Copa de Ferias de la temporada 1964/1965, con amargo recuerdo para el club de la Avenida de La Palmera.
La ida, jugada en el Benito Villamarín el 9 de septiembre de 1964 concluyó con empate a uno en el marcador. López adelantó a los locales en el minuto 46, tanto que fue contrarrestado por Pottier en el 76. Lo que parecía un buen tanteo para la vuelta se tornó en pesadilla, ya que el triunfo por 2-0 de los franceses descabalgó al Betis de Europa a las primeras de cambio.
Más de 30 años después, un incipiente y hasta entonces casi desconocido Zinedine Zidane cortó en octavos de final la excelente trayectoria que estaba sembrando en la Copa de la UEFA el equipo adiestrado por Lorenzo Serra Ferrer. Los béticos sucumbieron 2-0 ante el Girondins de Burdeos el 21 de noviembre de 1995. La vuelta, a pesar de la emoción que llevó aparejada, no sirvió para que el Real Betis accediera a los cuartos de final, ya que la victoria por 2-1 con goles de Alexis y Stosic resultaron insuficientes para apear a los franceses, que luego caerían en la final ante el todopoderoso Bayern de Múnich. El resto de la historia ya es conocida. Zidane, que aprovechó uno de los escenarios emblemáticos del fútbol europeo como es el Benito Villamarín para presentarse en sociedad, mutó posteriormente en uno de los futbolistas más grandes de la historia.
En la temporada 2002-2003, Europa solicitaba de nuevo la presencia del Betis. Una vez olvidadas las tinieblas de la Segunda División, los de Heliópolis retornaban a Primera División por la puerta grande, alcanzando el derecho a participar en la Copa de la UEFA. Sin embargo, nuevamente la desgracia volvía a colocar piedras en la carretera bética. En esta ocasión, un impetuoso AJ Auxerre, con futbolistas como Cissé o Mexès, puso fin a la aventura europea. A pesar de la renta obtenida en el partido de ida con un gol de Alfonso de penalti, el equipo de Víctor Fernández perdió por 2-0 en el Abbe Deschamps el 12 de diciembre de 2002, resultado que se traducía en la eliminación en dieciseisavos de final.
En los capítulos narrados, la felicidad esquivaba al Real Betis. Sueños rotos ante equipos del país vecino. Desconsuelo que se transformó en emoción en el 2005. Tras un imperial curso 2004-2005, el Betis concluyó cuarto clasificado en la Primera División, logrando un hito irrepetible en la historia de la entidad, la clasificación para la ronda previa de la UEFA Champions League. La fortuna traicionó a los de Serra Ferrer, ya que uno de los rivales más temibles del sorteo, el AS Monaco, sería el enemigo que deberían sortear los jugadores béticos para comparecer en la fase de grupos de la máxima competición a nivel de clubes en Europa. Una eliminatoria en la que hubo que sufrir sobremanera para validar la recompensa. En la ida, un tanto de Edú en el epílogo del encuentro daba ventaja a los andaluces ante el bloque de Maicon, Evra o Adebayor. La vuelta disparó el número de pulsaciones en los corazones de la hinchada bética. Oliveira adelantaba al Betis en el minuto 17, pero el AS Monaco volteaba el marcador gracias a los tantos de Gerard en el 33 y Malouda en el 62.
Empero, los genios nunca descansan. El Betis quería romper la fatídica tradición contra los equipos franceses, deseaba estar en la edición 2005-2006 de la Champions League. La hazaña fue posible gracias a una maniobra mayúscula. Y es que en el minuto 77, Ricardo Oliveira volvía a destapar el tarro de las esencias...