El Real Betis Balompié celebrará el próximo jueves 7 de septiembre, a las 13:00 horas, su tradicional ofrenda floral de inicio de temporada, con la asistencia del consejo de administración, el cuerpo técnico, los jugadores de la primera plantilla verdiblanca, el capellán del Real Betis y los campeones de la I Copa del Rey de 1977.

Este año en que el Real Betis conmemora el 40 Aniversario de la consecución del título de Copa de 1977, la entidad quiere seguir realizando actos que recuerden y aproximen el valor histórico de esta gesta mítica. Por ello, la ofrenda floral de inicio de temporada tendrá lugar en la Esperanza de Triana y en la Real Parroquia de Santa Ana, templo este último al que acudieron hace cuatro décadas los campeones de Copa para postrarse ante las plantas de la Virgen de la Divina Pastora.

El primero de los actos previstos en esta ofrenda floral se desarrollará en la capilla de los Marineros, sede canónica de la Hermandad de la Esperanza de Triana, a donde acudirán los jugadores de la primera plantilla, el consejo de administración, el cuerpo técnico, los campeones de la I Copa del Rey de 1977 y el capellán del Real Betis, padre Javier Santos. Concluida esta ceremonia, se trasladarán a la Real Parroquia de Santa Ana los campeones de la I Copa del Rey, los capitanes de la primera plantilla, el consejo de administración, y el capellán del Real Betis, donde llevarán a cabo una ofrenda floral ante la  Divina Pastora; la Madre de Dios del Rosario y la Virgen del Carmen.

Como se recordará, el consejo de administración del Real Betis Balompié decidió en su día que la ofrenda floral del Club no tuviera una sede fija y que de esta manera pudiera recorrer los diferentes templos, hermandades y cofradías de Sevilla, a fin de  agradecer el apoyo y la fidelidad de los béticos de todos los barrios de la ciudad a través de nuestras cofradías, auténticos referentes de la devoción popular sevillana. Es por ello que este año el consejo de administración del Real Betis Balompié ha acordado celebrar  la ofrenda floral en la Esperanza de Triana y en la Real Parroquia de Santa Ana, como testimonio de su cercanía con el Club y como homenaje a los legendarios campeones de la I Copa del Rey.