El segundo mes del año de 2015 vio a un Real Betis que se consolidaba en la parte alta de la tabla. No obstante, los tres partidos que el conjunto verdiblanco disputó durante el mes más corto del año tuvieron resultados un tanto irregulares. Una victoria y dos empates cosecharon los hombres de Pepe Mel. Sin embargo, los resultados obtenidos por los rivales directos en la lucha por el ascenso propiciaron que el Real Betis terminara el mes en mejor posición que con la que había terminado enero. El equipo encaraba marzo en tercera posición, a tan sólo dos puntos del líder, UD Las Palmas. Además, se aumentaba la racha de partidos consecutivos invicto. Ya eran 12 (cuatro de Juan Merino y ocho por parte de Mel) los encuentros sin conocer la derrota.

El primer encuentro de febrero fue el día 8, contra la SD Ponferradina, con resultado final de 1 a 1. Jorge Molina abría el marcador en la primera parte para el conjunto local. Pese a que el Real Betis dispuso de muchas ocasiones para aumentar la diferencia, el equipo visitante igualó el marcador en el descuento del partido al marcar Yuri de rechace tras un penalti lanzado por el propio delantero que detuvo Adán. La falta que supuso la pena máxima conllevó, además, la expulsión de Bruno.

En la jornada siguiente, la número 25 en la Liga Adelante, el Real Betis Balompié visitaba el Estadio Carlos Belmonte para medirse al Albacete Balompié. Empate a cero en un intenso partido en el que el conjunto de las Trece Barras dominó el juego, pero no fue capaz de materializar sus oportunidades. Pese a que el equipo no había conocido aún la derrota en lo que se llevaba de 2015, este resultado provocaba cierta inquietud, ya que el equipo retrocedía en la tabla hasta la quinta posición.

Quedaba por llegar el partido más importante del mes. El Real Betis recibía al Girona FC, situado en ese momento en tercera posición en la clasificación, dos puntos por encima del conjunto verdiblanco. Una victoria significaría no solo obtener los tres puntos frente a un rival directo, sino también ganarle en el golaveraje particular. Y así sucedió. Un intenso encuentro en el Estadio Benito Villamarín en el que el equipo de casa se llevó los tres puntos al vencer por 2-1, tantos que llegaron en la segunda mitad. Jorge Molina abrió el marcador tras un elegante recorte y un soberbio remate que llevó el júbilo a las gradas del coliseo verdiblanco. Girona FC tuvo sus opciones durante el segundo periodo, pero Dani Ceballos llevó la tranquilidad a las gradas con un tanto a falta de tres minutos del final. El Girona FC acortó distancias en el descuento con un extraordinario gol de falta de Granell que no sirvió de demasiado a su equipo.

A falta de tres meses para el final de la competición, la tabla de la Liga Adelante estaba muy apretada. Una lucha entre varios equipos entre los que el Real Betis se afianzaba con firmeza.