Isidoro: "La irrupción de Dani Ceballos me recuerda a la de Beñat en el último ascenso"
Cuando se publicó el calendario de la presente edición de la Liga Adelante, Isidoro Gómez (Pedrera, 1986), apuntó en mayúsculas dos citas guardadas con cariño, los dos enfrentamientos ante el Real Betis Balompié, el Club en el que ha desarrollado la mayor parte de su carrera deportiva y que le vio crecer como futbolista. Tres años después de abandonar la disciplina verdiblanca, el canterano bético rememora el ascenso conseguido en 2010 y valoraba el duelo de este sábado entre su actual equipo, el CD Numancia, y el bloque de Pepe Mel, técnico que le dirigió en el último ascenso del Real Betis.
¿Qué tal le va la vida en Soria? Estoy muy contento porque aquí se trabaja muy tranquilo. Es otra historia diferente a la de vivir en Sevilla. Me siento bien, aquí he encontrado un buen sitio para jugar al fútbol.
Doce partidos sin perder le hicieron soñar con cotas altas, pero el objetivo del CD Numancia continúa siendo la permanencia en la Liga Adelante. La pretensión que tenemos siempre es la permanencia, como la mayoría de los equipos de Segunda División, pero sin descartar nada. En esta categoría es importante ver que cuando no puedes sumar de tres en tres, hay que sacar al menos un empate. A pesar de esa racha de doce partidos sin perder, el objetivo que todos tenemos en la cabeza es el de la permanencia. Quizás nos han faltado victorias en esa racha para mirar un poco más arriba.
Y ahora en el calendario llega el Real Betis. Será un partido diferente para usted. Es un partido especial para mí por todo lo que representa, ya lo fue el partido de ida, por todo el tiempo que me llevé en el Betis y lo que viví allí. Siempre llevaré esa ‘cosita’ dentro de mí, pero ahora me toca defender al CD Numancia.
Ocho partidos son los que acumula sin perder el Real Betis. ¿Cómo está viendo al equipo de Pepe Mel? A partir de que llegó Merino sí que se le vio otra alegría al equipo. No sé por qué, pero en Segunda División es normal que aparezcan dinámicas negativas a lo largo de una temporada. Es normal que el Betis o cualquier equipo pueda perder. Merino le dio otro aire al equipo y ahora el Betis va en línea ascendente. Lo normal es que con la gente que tiene arriba el Betis este ahí hasta final de temporada. Además de poder jugar manteniendo la posesión, tiene gente rápida para jugar al contragolpe.
Para cualquier equipo de la Segunda División, ¿la visita del Betis supone un desafío especial? Es un partido normal. Sabemos la humildad que tiene este equipo y afrontamos con mucho respeto cualquier partido. Eso es lo que nos transmite el entrenador. En cuanto a mí, es un caso especial porque vengo de allí, pero para los compañeros supone enfrentarse a un equipo más de arriba. Siempre jugar con los de arriba tiene ese aliciente de saber que tienen jugadores muy determinantes a los que no se les puede permitir nada.
Conoce a Pepe Mel y sabe cómo se las gastan Rubén Castro y Jorge Molina. No nos negará que el sábado lo va a tener más fácil que sus compañeros. Fácil nunca se tiene. También tengo compañeros que han coincidido con Rubén Castro. Sabemos del potencial de Jorge Molina y Rubén y sabemos lo buenos que son. Eso nos vale como motivación para estar alerta, ya que en cualquier jugada te determinan un partido. Más allá de que debamos pararles, intentaré disfrutar del partido del sábado viendo a tan buenos futbolistas sobre el campo.
¿Es Rubén el mejor futbolista de la categoría? Sí, y yo diría que incluso de los mejores de Primera División. Es fantástico para el Betis que haya podido mantenerlo, porque lo normal es que Rubén Castro esté en Primera División, y Jorge Molina, igual. El Betis tiene varios futbolistas que son de Primera División, sobre todo en la parte de arriba.
Luce otros colores, pero el sentimiento bético no se olvida. ¿Sigue mucho lo que hace el Betis? Claro que sigo al Betis. Además, disfruto viendo jugar a algunos jugadores. Son jugadores que a los compañeros nos gusta ver jugar y es una suerte tenerlos en el Betis. Los aficionados del Betis deseamos que futbolistas como Rubén Castro o Jorge Molina estén mucho tiempo con nosotros porque tienen mucho gol.
Estuvo presente en la última victoria bética en el Estadio Los Pajaritos. ¿Qué recuerdos guarda de aquel partido? Cuando llegué a Soria estaban futbolistas como Cedrick o Nagore y hablamos de aquel partido. Fue un partido con un frío tremendo y no hicimos mucho. Es de esos partidos que tienen los equipos que ves que van a ascender. No jugamos muy bien y ellos tuvieron muchas ocasiones. Hicimos un gol de penalti y nos salvaron los palos, fuimos muy efectivos. Fue de esos partidos que ganas porque tienes toda la ‘pinta’ de ascender, que te salen por inercia.
Nos sirve en bandeja la siguiente cuestión. Para ascender, no basta con practicar un fútbol bonito. Hay que saber sufrir y tirar de oficio. Cuando me preguntan si veo al Betis en Primera División, siempre digo que sí, pero no es tan fácil porque cualquier equipo te gana en Segunda División. No puedes bajar los brazos. Puedes tener más motivación con los de arriba y ganar, pero luego pierdes con los de abajo y te desenganchas. Recuerdo la temporada que subimos que íbamos sobrados y luego perdimos 5 partidos seguidos. En la categoría cualquier equipo te hace sufrir. En equipos como el Betis no es que no sea fácil, sino que es más difícil todavía, ya que el ascenso es una obligación. La gente se lo reclama desde el principio a equipos como el Betis porque tiene jugadores muy buenos, pero las temporadas son largas y hay que saber ser constante durante todo el año, yendo paso a paso.
En aquella temporada de la que hablábamos anteriormente, acumuló un buen número de minutos y fue importante para el objetivo. Todos tuvimos nuestra cuota de importancia. Teníamos una buena plantilla, con gente de abajo más la experiencia de gente más veterana, así que había un poco de todo. Veníamos de una situación humilde y el Betis entró en Concurso de Acreedores. Fueron momentos nada fáciles, pero nos centramos en ganar y a través de las victorias, todo era más fácil. El Club atravesaba una situación complicada, pero nosotros no prestábamos atención a otras cosas.
¿En qué se diferencia aquel Betis del 2010 al actual? Veo unas cualidades un poco diferentes en el Betis actual a las del Betis de 2010. Ahora hay jugadores como Cejudo o Pacheco, que son jugadores diferentes a los que había aquel año. Sí es verdad que veo superior al Betis a muchos equipos de Segunda División. Al principio empezó mal, pero el Betis de ahora no tiene nada que ver con el de comienzos de temporada. Al Betis se le ve que tiene algo diferente respecto a los otros equipos. Al final, antes o después eso se tiene que reflejar en el campo.
Un ascenso en el que cobró gran relevancia la aportación de los canteranos. Siempre es necesario que haya gente joven porque da un plus. Para conseguir objetivos como el ascenso, todos deben ser importantes, canteranos y veteranos. No creo que los veteranos deban ser más importantes, sino que todos deben aportar sus cualidades. Por mucho que diga la gente que hay que fichar siempre, es cierto que tiene que haber esos fichajes, pero también debe haber gente que venga desde abajo. En cualquier equipo es necesaria la gente que empuje con ganas e ilusión, que dé más cosas aparte del gol, como la entrega y la identificación con el Club. A la gente le cuesta entender eso, pero el que está dentro lo ve, que los que vienen de abajo te van a dar un plus que nunca te lo va a dar un jugador experimentado porque los canteranos saben lo que significa el Club.
Y ahora irrumpe con fuerza Dani Ceballos… Me recuerda a Beñat. No ha hecho ni siquiera la pretemporada con el primer equipo, como tampoco la hizo Beñat y estuvo luego a un nivel espectacular. De Dani destacaría las condiciones que tiene, la ilusión que pone en el campo y que nunca se viene abajo. He visto partidos que se le han puesto en contra al Betis y ha seguido jugando igual, con mucha personalidad.
No es una materia en la que se prodigue demasiado, pero la pregunta es inevitable. ¿Celebraría el sábado si marca? No lo celebraría por respeto al equipo que me lo ha dado todo, el estar donde estoy y tener lo que tengo. Le estaría dando algo positivo a mi equipo, pero no lo celebraría por ese motivo.