Un buen Betis cae en el Bernabéu (2-1)
Sin complejos, con las ideas claras y con ambición. De esa forma salió el Real Betis en el primer partido de Liga en el Bernabéu. Los conceptos estaban claros y los hombres de Mel supieron aplicarlos en la primera mitad. Presión arriba cuando Diego López sacaba en corto, espera atrás en la posesión y rápidas salidas a la contra. Con eso el Betis fue capaz de crearle muchos apuros en la primera mitad al nuevo proyecto blanco. Los primeros minutos de asedio blanco fueron solventados y traducidos en peligro. Cedrick le imprimió la velocidad necesaria en ataque y tomaba el protagonismo. Tanto, que en el minuto 14 una arrancada suya dio lugar al primer gol. El congoleño se fue por velocidad de Sergio Ramos y le sacó un buen pase para que Molina no perdonara. El de Alcoy la había tenido unos minutos antes en un mano a mano con el portero blanco. El Betis culminaba unos inmejorables minutos en el coliseo blanco. Y seguía llevando peligro. Verdú lanzó alto una buena jugada de ataque y de ahí se pasó a la respuesta blanca. El conjunto de Pepe Mel lo paso mal entre el 20 y el 24, hasta que en el minuto 26 llegó el gol de Bezema. Se repuso el Betis y volvía a querer protagonismo. Seguía con la misma táctica y creaba ocasiones. La escuadra heliopolitana ha ensayado mucho la estrategia en pretemporada y esta surtía efecto. Nosa estrellaba en el larguero una de ellas. Y Cedrick no culminaba un ataque. Con buen juego y buenas sensaciones se marchaba al descanso. En el regreso, el Madrid apretó. El Betis se mostraba cansado y algo atrás. El conjunto de Ancelotti volcó todo su ataque en el lado de Marcelo y estaba generando mucho peligro. Llegaron los cambios. Salieron Cedrick, Juanfran y Verdú. Entraron Juan Carlos, Vadillo y Braian. No tenía las mismas piernas en ataque, el Madrid tampoco llegaba con la misma claridad del principio. Pero un centro de calidad de Marcelo, en el minuto 40, era rematado por Isco a gol. El Madrid sacaba el máximo rendimiento de una jugada de peligro. Una pena por el buen juego verdiblanco y por las ganas que había puesto el equipo.