Un kilómetro menos (4-0)

Si el encuentro contra el Barcelona B era una prueba con una dificultad escondida, no lo era menos el enfrentamiento que los verdiblancos iban a tener en el Benito Villamarín ante el Real Zaragoza. Mel incluía variantes obligadas, la de Casado por Varela, y otras por decisión técnica, Kadir por Pacheco. Eran cambios que no afectaban a la manera de jugar del equipo porque el cuadro heliopolitano salía con el mismo estilo que en el Miniestadi.

 

El Betis jugaba muy arriba y cerca de las inmediaciones de la portería rival. La primera jugada de peligro verdiblanco fue una clara mano de Cabrera dentro del área de Bono que no señalaba el colegiado bajo el clamor de todos los jugadores verdiblancos. Tampoco señalizó el tinerfeño Trujillo Suárez, dos jugadas más tarde, una mano de Bruno que igualmente reclamaban los maños. Justo esta jugada sirvió de punto de inflexión para los visitantes porque tiraron la línea defensiva hasta el medio del campo y comenzaron a mandar en el partido. Hasta ese momento, Portillo y Ceballos hacía jugar al Betis pero dejaron de dominar el esférico y eso lo notaron los suyos. Igualmente la presión no era acertada y se rompía de manera cómoda.

 

En el 24’, Pedro le ganaba la espalda a la defensa y recibía un pase interior plantándose solo con Adán que desbarataba la ocasión y después el palo impedía el primero de los zaragocistas. El Betis empezaba a pasarlo mal pero Molina no quería faltar a su cita con el gol y salió en auxilio. El delantero está tirando, y de que manera, de los suyos en materia anotadora. Es el mejor delantero de la segunda vuelta y además tiene un especial idilio con el Villamarín que no quiere abandonar. Ceballos cogía una pelota escorada a la banda derecha y la ponía en el corazón del área para el de Alcoy. El ‘19’ controlaba, recortaba, se marcaba una magnífica jugada y su tiro era definitivo para colocar el 1-0 en el marcador. Son ya nueve las jornadas consecutivas que Molina marca en el Villamarín.

 

Con el gol se diluyó el buen hacer maño y se igualaron las fuerzas pero con la ventaja bética sobre el luminoso. A partir de este momento, las mejores ocasiones fueron de los de Mel. Kadir ponía un buen centro a Rubén Castro que remataba a la perfección pero Bono despejaba una pelota que posteriormente impactaba en el palo. El segundo también pudo llegar en una buena contra que lanzaba Molina pero que no acertaba a conectar con el canario cuando se encontraba solo para encarar a Bono. La posesión ya era verdiblanca y el Betis se sentía superior en el partido. Por tercera ocasión Rubén pudo aumentar la distancia si su tiro no hubiera chocado en la defensa tras una buena jugada hilvanada por Ceballos, Molina y Portillo. Uno a cero arriba y con muy buenas sensaciones acababa la primera parte.

 

Comenzaba asustando el Real Zaragoza en la segunda mitad con varias llegadas con cierto peligro. En una de ellas, Borja marcaba pero era anulado el gol por fuera de juego. Pero tal y como ocurriera en el primer acto, cuando el Betis sufría algo de inquietud, aparecía el gol. Molinero ponía un balón perfecto a Rubén Castro que en esta ocasión no iba a desaprovechar y metía el segundo. Inapelable el remate del ‘24’ que aportaba tranquilidad.

 

El partido caía en una parsimonia que beneficiaba a los intereses verdiblancos. Ninguno de los dos equipos aumentaba el ritmo del choque. Al Betis porque no le interesaba y el Zaragoza porque se veía incapaz. Y con este ritmo trotón iba a llegar el tercero. Casado dibujaba un pase bellísimo hacia Rubén Castro dejándolo en un mano a mano con el meta. El canario picaba la bola en exceso y no acertaba a marcar pero cogía el rechace y centraba para que Molina pusiera la puntilla al duelo. 3-0 en el minuto 18 y los béticos iban a vivir de forma plácida hasta el minuto 90, tocando y gustándose. Incluso Molina pudo hacer su hat-trick pero fue Rubén quien marcó el cuarto en el 43’ después de una jugada rocambolesca dentro del área.

 

El Betis terminaba con un partido hallando los goles en momentos claves del mismo y tiñendo de facilidad un partido que a priori no lo era. Mel comparaba la Liga con una maratón y, tras una contundente victoria, a su equipo ya le queda un kilómetro menos. 

 

4- Real Betis: Adán; Molinero, Bruno, Figueras, Casado (Cejudo, 74); Kadir (N’Diaye, 66), Lolo Reyes, Dani Ceballos (Vadillo, 79), Portillo; Jorge Molina y Rubén Castro.

0- Real Zaragoza: Bono; Vallejo, Mario, Rubén (Rico, 66), Cabrera; Basha, Dorca;, Jaime, Natxo Insa (Javi Álamo, 46), Pedro (William José, 71); y Borja Bastón.

Goles: 1-0, min. 28: Jorge Molina. 2-0, min. 52: Rubén Castro. 3-0, min. 63: Jorge Molina. 4-0, min. 89: Rubén Castro.

Árbitro: Daniel Jesús Trujillo Suárez (Comité Tinerfeño). Amonestó al visitante Mario.