Alfonso Sánchez ha sido el invitado de esta noche en el programa de Betis TV ‘Triple Betis’. El capitán no ha tenido problemas para dar la cara y explicar los motivos que, bajo su punto de vista, han llevado al equipo a esta situación.

Balance negativo. “El balance es negativo. Sabemos que las cosas no están saliendo como deseamos. El objetivo es conseguir la primera victoria lo antes posible, esperemos que sea este sábado. Estamos centrados en trabajar día a día”.

Demasiadas derrotas. “Han afectado muchas circunstancias, una pretemporada un poco atípica, sin demasiados partidos de pretemporada, una confección de plantilla difícil por salir tarde al mercado. Todo esto ha afectado. No quiero que mis palabras sirvan a excusa, pero sí son factores que no han ayudado a que las cosas salgan bien. Nosotros nos centramos en hacer las cosas bien cada día, que todos empujemos en buena dirección. La dinámica está siendo difícil de llevar por el cúmulo de derrotas que llevamos en la mochila. Pero tenemos que ser optimistas, positivos, porque somos nosotros los que tenemos que sacar esto adelante”.

Parón liguero. “Espero que haya sentado bien a todos. Ha dado tiempo para hacer una especie de pretemporada. Queremos jugar. Las semanas se nos hacen largas”.

Mejorar en defensa.  “Intento transmitir intensidad defensiva, una serie de comunicación en defensa que le hace falta al equipo. Casi todos los rivales acaban con un alto porcentaje de tiros de dos, que son bandejas fáciles que anotan en la pintura. Si nos ganan, que nos ganen tirando de tres. Por mi parte, intento contagiar a mis compañeros, ser la voz cantante y ayudar. Es una cosa que tenemos que trabajar y que hicimos la semana pasada. Todo tiene un proceso. La idea es clara y es algo que los jugadores tenemos que interiorizar”.

Situación personal. “Estoy contento porque físicamente estoy bien. Las oportunidades que me han dado Óscar o Alejandro las estoy aprovechando. Tengo que tener paciencia. Sé que acabaré entrando en rotación y teniendo más protagonismo. Doy el 100%. El resto es decisión del entrenador. Lo respeto y valoro que mire el bien colectivo, que es lo que prima. Me gustaría jugar más, pero sobre todo ganar. Soy un jugador de equipo. Lo que quiero es ayudar. Yo estaría contento si juego 30 segundos y el equipo gana. Saldría del pabellón con una sonrisa de oreja a oreja”.

Demasiada ansiedad. “Es lógico que el grupo sienta esa presión, esa ansiedad por lograr la primera victoria. Ese debe ser el fruto del trabajo que estamos haciendo. Es difícil trabajar nueve o diez semanas seguidas sin degustar una victoria. Es normal que tengamos esa mochila con ese peso, pero también son dinámicas y rachas. Somos nosotros los que tenemos que sacar esto adelante, afrontarlo como un reto. Dentro de la situación, tenemos que ser optimistas. Las cosas van a cambiar pronto seguro”.

Transmitir el mensaje. “Yo hasta cierto punto puedo mantener conversaciones con mis compañeros. Explicarles lo que es el Club, lo que es la ciudad, el sentimiento bético, la afición que hay detrás de nosotros. Son muchas cosas. Hay un porcentaje que es mi responsabilidad, pero hay otro porcentaje relacionado con que los compañeros se sientan involucrados. Una de las frases favoritas es de mi segundo entrenador, Javi Carrasco, que al final esto del baloncesto o sentir un club no son matemáticas. Esto no es dos más dos. Esto hay que sentirlo. Al final es respetar nuestro trabajo. Nadie piensa que estamos jugando mal aposta. Tenemos que seguir uniendo nuestras piezas. Y ese sentimiento de querer hacer las cosas bien tiene que ganar a cualquier otro sentimiento”.

Draper. “Ilusionó porque es un jugador muy experimentado, que tiene mucho baloncesto en sus manos. Es uno de los bases top de Europa. Está en un proceso de adquirir la mejor condición física. Venía de estar entrenando en Estados Unidos. Está haciendo una pequeña pretemporada, pero es una pieza muy importante para nosotros. Es un base muy correcto. No suele cometer errores. Defensivamente nos puede dar un plus, a la hora de jugar con criterio el balón en ataque, también. Está muy capacitado también para darnos puntos. Cuando se vaya sintiendo mejor y tenga más minutos, espero que nos ayude muchísimo”.

Quintana. “Es un entrenador muy claro, con las cosas muy claras. Ha decidido darle prioridad a algunos aspectos del juego. Necesita un proceso de aclimatación, conocer los jugadores que tiene. Nosotros tenemos que adaptarnos a él y está haciendo las cosas que tiene que hacer”.

Trato individual. “Individualmente no me gusta hablar. Óscar es un entrenador justo. Sé que voy a tener mi oportunidad. Él te mira a los ojos y va de cara, para lo bueno y para lo malo. Sé que va a intentar sacar lo mejor de mí y lo mejor del equipo. Habrá momentos con más o menos minutos. En mi forma de entender el baloncesto, no entra poner un pero a una decisión de un entrenador. Las cosas se ganan con sacrificio. Sé que los minutos que me dé voy a ir a muerte y a partirme el pecho en cada jugada”.

Afición. “Estamos en deuda con ellos. Estoy deseando que acabe un partido en San Pablo, ir al centro de la pista y aplaudirles después de ganar un partido. Ellos son los que lo merecen. Pocas palabras podemos decirles. Hay que demostrar las cosas, hay que ganarse cada grito y cada aliento de ánimo. Nos lo tenemos que ganar. Es trabajo, trabajo y trabajo. Merecen que ganemos en nuestra cancha”.

Iberostar Tenerife. “Fue el equipo revelación el pasado año e hizo muy buen baloncesto. Daba gusto verlos jugar. Tiene cuatro, cinco o seis jugadores que pueden hacer las cosas muy bien, experimentados, que juegan varias competiciones. Es un equipo agresivo que en casa suele jugar con un punto más de motivación. Siempre que hay un cambio de entrenador intenta poner mucha intensidad, todos los jugadores quieren hacerlo bien y ganarse la confianza. La llegada de Fotis será un plus para ellos. Esperamos un Tenerife dolido por esas últimas derrotas, pero ahora mismo lo más importante somos nosotros, que demos el 100%”.

Internacionales. “Mezclar todas las individualidades es complicado. No somos un equipo. Ese es el caso que nos ocurre con Blake. Es un jugador con talento, con algo especial. Es un jugador experto, pero es su primera experiencia en España. Todo tiene un proceso de aprendizaje. Seguimos intentando sacar la mejor versión de cada uno. Él tiene ese talento, pero falta que se acople al entrenador, a los compañeros. Espero que vengan con esas buenas sensaciones de esta ventana FIBA y espero que en Tenerife haga lo mismo”.