El gran día de Blake Schilb
Las victorias en el baloncesto no vienen solas, llegan cargadas de actuaciones colectivas e individuales como la de Blake Schilb ante Monbus Obradoiro, un día que seguro recordará como su primer gran día con la elástica verdiblanca.
El jugador estadounidense, pero nacionalizado checo, completó un encuentro en el que sus manos fueron claves para llegar al triunfo (23 puntos). Su buena actuación con su selección en los dos últimos partidos ante Islandia y Finlandia tuvieron su réplica en la ACB, en San Pablo y ante Monbus Obradoiro.
Al margen de los puntos, hay que quedarse con el resto de estadísticas que le han hecho quedar como el segundo jugador más valorado (22) del encuentro tras su compañero Ryan Kelly (26). Cuatro asistencias, tres rebotes, una falta recibida y más de un 60 % de acierto desde la línea de tres puntos, unos datos que se produjeron en los 31 minutos que estuvo en cancha, convirtiéndose así en el jugador que más participó en el bando de los de Óscar Quintana.
Además de sus números hay que destacar el cómo llegó la última canasta, un triple en el momento más caliente y agotando la posesión que dejaba en nada las opciones de remontada de los gallegos, un Monbus Obradoiro que llegaba a Sevilla como la segunda mejor defensa de la Liga Endesa.
En definitiva, primera huella marcada por Blake Schilb, un punto y seguido que deberá tener continuidad en las próximas jornadas en las visitas a Murcia y Canarias.