El Betis Deportivo ha perdido en Lucena su condición de invicto frente al líder de la categoría, que se adelantó en la primera parte con un gol de Luismi y logró resistir el asedio verdiblanco gracias, en gran medida, a la actuación de su portero.

Con las bajas de Edgar y Altamirano, Manel Ruano sacó un once con varias novedades, destacando especialmente la presencia de dos juveniles que hicieron su estreno con el Betis Deportivo: el central Visus y el extremo Ndo. También repetía en la alineación Geovanni después de que el Comité de Competición atendiera las alegaciones de la entidad heliopolitana y dejara sin efecto la tarjeta roja que vio contra el Sevilla C. El partido empezó con ritmo y con un buen ambiente en la grada. Se notaba que sobre el césped había dos buenos equipos y que el liderato estaba en juego. Pese a todo, las ocasiones tardaron en llegar. Y desgraciadamente, la primera fue para dentro. Una buena jugada por la banda derecha del Ciudad de Lucena fue culminada por Luismi con un remate certero. Como en Arcos o en Conil, el partido se ponía cuesta arriba en la primera mitad y tocaba remontar.

El gol no dejó noqueado al Betis Deportivo. Más bien lo espoleó. Buena prueba de ello es que se hizo con el control del juego y poco a poco fue generando peligro. El primer aviso fue de Paul con un disparo lejano y poco después fue Rodri el que probó fortuna buscando la escuadra. No obstante, la más clara la tuvo Visus con un remate de cabeza que acabó en el lateral de la red. Con un Ndo muy incisivo y un árbitro tremendamente permisivo con la agresividad de los locales, el partido llegó al tiempo de descanso.

Tras el paso de los jugadores por vestuarios, el dominio del Betis Deportivo se hizo aún más evidente y las ocasiones comenzaron a sucederse. En el 57' Mizzian se plantó solo frente al portero y cruzó el balón en exceso. Seguidamente fue Ndo, quien, primero con la cabeza y luego con un disparo que salvó un defensa bajo palos, estuvo a punto de firmar un empate que se resistía. Ruano movió el banquillo y dio entrada a Juan Moreno, Robert y Raúl, por ese orden. El filial heliopolitano seguía intentándolo por todos los medios. También a balón parado con una falta directa botada por Geovanni que forzó la estirada del meta Javi Cuenca, el más destacado de su equipo. Y no fue la última, porque Paul, con un testarazo, y Robert, con un disparo postrero que salió lamiendo el palo, lo intentaron hasta el pitido final.