ENTREVISTA | Lidia Catalán, el comodín perfecto de María Pry
14 partidos, 7 de ellos como titular, de los 19 disputados hasta la fecha. A Lidia Catalán le costó sumar minutos, pero ahora mismo vive su mejor momento de lo que llevamos de temporada. De hecho, el Real Betis Féminas fue a Bilbao sin Laura González, fija para María Pry en el centro del campo bético, pero su ausencia por sanción fue cubierta con nota por una Lidia que sigue creciendo con el paso de las jornadas.
La jugadora espera poder disfrutar de más minutos en próximos encuentros aprovechando su polivalencia y que puede actuar en diferentes zonas del campo. De hecho, es uno de los comodines de la entrenadora bética, que casi siempre recurre a Lidia para suplir alguna baja de las habituales en el once, ya sea en posiciones más retrasadas -como ocurrió en Bilbao- o más adelantadas -como vimos en Albacete jugando más cerca del área-. Pero Lidia quiere más.
“Es verdad que los números están ahí. No están mal para ser mi primera temporada en Primera, pero en relación con los minutos del año pasado me habría gustado haber jugado más. La verdad es que me costó un poco la adaptación. Entrenaba muy bien. Pry me lo decía, pero luego no se reflejaba en los partidos, de ahí que no jugara tantos minutos. Ahora estoy mejor adaptada y espero tener más continuidad”, apuntaba la centrocampista verdiblanca, que señalaba los partidos de Albacete y Bilbao como los dos mejores de la temporada en el apartado individual.
“Se puede decir que Lidia va creciendo con la evolución del Betis. A muchas compañeras les ha pasado lo mismo. Con minutos se va notando esa mejoría”, agregó la mediocentro del Real Betis Féminas, quien admitió el golpe anímico que supuso su lesión tras el partido en Albacete: “La verdad es que, aunque fue una lesión de una semana, me afectó bastante. Pry me dio la oportunidad. Lo hice bien y el resultado fue positivo. Pero llegó la lesión y tenía que volver a luchar para estar en el once”.
Eso sí, Lidia admite que la competencia para hacerse con un sitio es enorme, sobre todo por la gran temporada que está haciendo Laura González. “Mi puesto es pivote, aunque María también me sitúa en otras posiciones. Tengo que aprovechar mis oportunidades al máximo. Ahora mismo está muy difícil porque compito con Laura, que está haciendo un temporadón. Debo aprovechar los momentos en que ella no esté o hacerlo lo mejor posible cuando juegue con ella”, afirmaba Lidia, que, independientemente de puestos específicos o sistemas de juego, lo que quiere es jugar. “Con defensa de cinco nos costó adaptarnos porque es un sistema diferente al de la temporada pasada. A mí me da igual defensa de cuatro o de cinco. Incluso me da igual donde me ponga”, concluía.