El Perfil: Fernando
Fernando Martínez Escribano fue titular indiscutible y pieza fundamental de aquel equipo que se proclamó campeón de la Copa del Rey en 2005. Un mediapunta con excelente trato de balón y mucho gol que encajó perfectamente en el Real Betis, cuya camiseta defendió durante 6 temporadas.
Nacido en Málaga el 2 de junio de 1979, hijo de un entrenador de las categorías inferiores del club malacitano, el fútbol fue su vida desde pequeño. Debutó en el Málaga CF, entonces en Segunda B, con apenas 17 años y en 1998 se integró en la cantera del Real Madrid. Ya militando en el filial, debutó con el Real Madrid en Primera División el 15 de abril de 2000 ante el Zaragoza en el estadio de La Romareda.
Al año siguiente fue cedido al Real Valladolid, donde permaneció dos temporadas, marcando 15 goles en su segunda campaña, lo que lo convirtió en un futbolista cotizado y pretendido por muchos clubes españoles.
De entre todos estos pretendientes, fue el Real Betis quien se hizo con sus servicios. El fichaje por 6 temporadas se anuncia el 23 de agosto de 2002 y tiene un coste de 5,2 millones de euros con una opción de recompra por parte del Madrid. Según se explica en su momento, la contratación de Fernando ha sido una petición expresa del entonces entrenador verdiblanco, Víctor Fernández, quien de este modo conforma una excelente plantilla a la que también ha llegado ese verano el brasileño Marcos Assunçao y a la que ha regresado Alfonso Pérez.
Fernando debuta con el escudo del Real Betis en la primera fecha de la Liga 2002-03, partido jugado en La Coruña ante el Super Depor, y que se convierte en un grandísimo recital bético que concluye con victoria por 2-4. Su primer gol como bético lo marca el 3 de noviembre de 2002 ante el Málaga en Heliópolis en la octava jornada del campeonato, una recordada tarde en el que también anotaría un segundo gol de penalti. El Betis ganó 3-0.
Esa campaña alcanzó de nuevo la cifra de 15 goles marcados, aunque su promedio ya no volviera a ser similar en el futuro. Pero en la campaña 2004-05, a las órdenes de Lorenzo Serra, se erigió en titular indiscutible y figura clave en la mediapunta. Jugó los 120 minutos de la final de Copa contra Osasuna y al año siguiente defendió la camiseta del Real Betis en la Champions League.
Durante sus 6 temporadas como jugador del Betis, Fernando disputó 192 partidos oficiales (148 de Liga; 30 de la Copa del Rey; 6 de la Copa UEFA; 6 de la Champions League y 2 de la Supercopa de España) marcando 34 goles.
Abandonó la disciplina verdiblanca en el verano de 2008, fichando por el Málaga CF, donde permaneció hasta 2011. Más tarde jugó en el equipo húngaro del DVTK, concluyendo su contrato en 2013.
De Fernando Martínez Escribano permanece entre la afición bética el recuerdo de un futbolista con muy buenos fundamentos técnicos, un gran oportunismo ante la puerta contraria y una extraordinaria eficacia en el lanzamiento de penaltis.