Isco conduce el balón en la tarde del estreno liguero en Villarreal.

Buen arranque de campeonato

El Real Betis comienza la temporada con buenas sensaciones y esperanzadores resultados: 7 puntos sobre 12 ante un grupo de rivales destinados a ocupar la primera parte de la tabla clasificatoria.

Ilusionante arranque de temporada para el primer equipo verdiblanco. Los hombres de Pellegrini han solventado con nota los problemas inherentes al arranque de competición, máxime cuando nos enfrentamos a cuatro equipos llamados a ocupar la primera mitad de la tabla clasificatoria. Después de un verano donde se han producido numerosos cambios en la composición del vestuario local, todo parece indicar que la dirección deportiva y el entrenador chileno han vuelto a realizar los ajustes necesarios para conformar una plantilla de lo más competitiva que permita abordar con ilusión los objetivos deportivos para el curso 2023/24. 

El primero de los partidos objeto de este análisis fue el que inauguró la temporada en Villarreal. Jornada 1, ante un difícil rival que ya nos superó en la clasificación el año pasado Pero del estadio de La Cerámica volvieron los verdiblancos con 3 magníficos puntos después de una rutilante actuación de Isco así como de una participación activa de los hombres de ataque, con sendos goles de Ayoze y William José -este, in extremis- que sirvieron para disipar de un plumazo las sensaciones que dejó una irregular temporada en cuanto a los resultados, nada nuevo desde que el fútbol es fútbol y se quieres extraer conclusiones de esos partidos de preparación estival.

 La vuelta a Heliópolis se produjo una semana después, siendo el Atlético de Madrid el rival a batir. Un equipo el colchonero que no se nos da nada bien a tenor de los resultados de los últimos años, y que no pudo ni supo salir de Villamarín más que un meritorio empate a cero que dejó satisfecho a ambas partes. El Betis quiso, pudo, pero no consiguió hacerse con una victoria. Cuando no se puede ganar lo mejor es empatar y así quedó rubricado por ambos entrenadores a la finalización del partido. Isco Alarcón volvió a erigirse como mejor jugador del partido, dejando evidente la recuperación de su mejor estado de forma y encendiendo todas las ilusiones de los aficionados verdiblancos.

El tercero de los partidos objeto de esta reflexión fue el inclasificable de la noche de San Mamés, con un inicio de encuentro que nos trajo una ventaja de 2 goles apenas a los 10 minutos de juego y que disparó todas las ilusiones de la parroquia verdiblanca. Tuvimos ocasiones para sentenciar el partido, pero no las culminamos, y a partir de ahí entraron factores exógenos como suelen ser habituales en el fútbol moderno de estos últimos tiempos - el inexplicable uso del VAR- permitieron al Athletic Club meterse de nuevo en el choque y cierto es que los vizcaínos empujaron mucho y bien para voltear el resultado antes incluso de que finalizara la primera mitad. Durante el segundo tiempo, el Betis estuvo muy lejos de la portería local y no solo se vio imposibilitado para hacer el empate, sino que recibió un gol en los instantes postreros del choque que dejó la victoria en Vizcaya y una sensación agria tras lo que pudo haber sido y no fue.

Tras el tobogán de sensaciones en la noche bilbaína el Betis volvía a comparecer ante los suyos en la disputa de la cuarta jornada del campeonato. Una noche húmeda ante un rival, el Rayo Vallecano del que no te puedes fiar coma más a tenor del fútbol que lleva demostrando en las últimas temporadas. Un partido difícil muy igualado donde el Betis sí supo imponer su calidad y su buen fútbol en la segunda mitad -gran gol de Willian José- para hacerse acreedor de una victoria que lo sitúa con 7 puntos sobre 12 y con las emociones e ilusiones encendidas de cara todo lo que resta de esta, esperemos, ilusionante temporada.

Movimientos en el vestuario

Al igual que hicimos en las entregas anteriores dedicamos un espacio para dejar constancia de los movimientos producidos en la composición del plantel verdiblanco. Las últimas fechas de mercado nos dejaron un sinfín de negociaciones y las salidas de Paul  Akoukou, Juanmi Jimenez, Raúl García de Haro y más recientemente, la del italo-brasileño Luiz Felipe, además de las llegadas al vestuario local de 2 nuevos jugadores: el joven Sergi Altimira, quién dispuso de sus primeros minutos en la máxima competición en la noche de la victoria ante el Rayo, y el ilusionante Ez Abde, procedente del Fútbol Club Barcelona, futbolista llamado a tener un papel muy principal en los planes del entrenador verdiblanco durante los próximos 9 meses de competición.