El Real Betis, verdugo de 12 'Primeras' en Copa del Rey cuando se encontraba en Segunda División

Los verdiblancos afrontan su 21ª participación en el torneo copero siendo equipo de Segunda División; la cota más alta, el subcampeoanto de 1931

La Copa del Rey es un torneo especial. Un campeonato en el que las diferencias disminuyen, donde la ilusión no entiende de categorías y los contrastes se reducen. Un camino de ilusión que no entiende de divisiones y en el que es posible realizar proezas aun sin pertenecer a la máxima categoría del fútbol español. Sirva esa singularidad que lleva aparejada la Copa del Rey para ilustrar el primer encuentro del emparejamiento entre el Real Betis Balompié y la UD Almería.

Regresa una competición que la entidad guarda por dos veces dentro de su palmarés. Ganador en dos ocasiones (1977 y 2005), la Copa del Rey vuelve a Heliópolis en un escenario que espera ser arreglado a final de campaña con el ascenso a Primera División. Y es que el Betis, inmerso en la meta del reingreso en la Liga BBVA, recibe mañana a la UD Almería siendo equipo de la categoría de plata. En todo caso, esa condición, como ha venido demostrando a lo largo de su historia, no supone obstáculo alguno para el posible progreso en un torneo que despierta gran entusiasmo entre la afición del Real Betis Balompié.

Hasta doce equipos de Primera Divisón ha eliminado en Copa del Rey el equipo de las trece barras mientras militaba en Segunda División, encontrando algunas hazañas que merecen ser narradas. El precedente más exuberante del historial lo hallamos en el ejercicio 1930/31, en el que tras dejar en el camino a Real Sociedad, Real Madrid y Arenas de Getxo, los béticos se plantaron en la final, en la que cayeron por 3-1 ante el Athletic Club. Una derrota que supo a gloria, ya que la escuadra de las trece barras se convirtió en la primera capaz de pelear por un título naconal pese a no haber debutado aún en Primera División.

La aventura continuó, y el Betis se transformó de verdugo en dos ocasiones del RCD Deportivo de La Coruña (campañas 46/47 y 69/70) y del RCD Espanyol (66/67 y 70/71). En todas ellas, el pelotón verdiblanco se toparía con los octavos de final como barrera, como también ocurriría en al temporada 89/90. Tras ajusticiar a RCD Mallorca y CD Castellón, el Cádiz CF pondría fin al sueño del Real Betis Balompié.

Para el final, aguardan las dos travesías más brillantes. En el curso 93/94, el Betis dio la campanada en el Camp Nou y fue capaz de sentenciar a rutilante Fútbol Club Barcelona, conocido en aquella época como el 'Dream Team' por su juego preciosista. Para el recuerdo, el gol de Juanito que otorgaba a los béticos el pase a la sigueinte ronda. Solo la potencia incontestable de un Real Zaragoza que se proclamaría ese año campeón de la Copa del Rey y de la Recopa de Europa en el año venidero, desbarató la gesta bética.

Situación similar la que se vivió en el último ejemplo de este vínculo especial. Ejercicio 10/11. El Betis, con un fútbol espectacular, derrota a Real Zaragoza y Getafe CF. Tuvo que ser el FC Barcelona entrenado por Pep Guardiola quien acabara con el gran recorrido de los verdiblancos, que en todo caso, se permitieron el lujo de vencer por 3-1 al conjunto culé en el encuentro de vuelta celebrado en el Estadio Benito Villamarín.

No acaban ahí los datos que invitan al optimismo. Las últimas 4 veces en las que el Betis partió como equipo de Segunda División y eliminó a algún equipo de la máxima categoría en la Copa del Rey, obró el retorno a Primera División esa misma campaña.

En total, 20 participaciones en Copa del Rey como conjunto de Segunda División. 2 veces hasta segunda ronda, 4 ocasiones en dieciseisavos de final, 11 octavos de final disputados, 1 acceso a cuartos de final, unas semifinales y una final conforman el bagaje verdiblanco. 

 

LA DEUDA DE JUAN MERINO

Juan Merino escribirá mañana otro capítulo en su particular transcurrir en la Copa del Rey. El entrenador del Real Betis Balompié, a lo largo de su dilatada trayectoria como futbolista profesional, sucumbió en dos finales del torneo copero. La primera de ellas la perdió vistiendo la elástica del Betis en la temporada 1996/97. El FC Barcelona destrozó cualquier festejo, hecho que le volvería a suceder en el año 2003, cuando ya en las filas del Real Club Recreativo de Huelva, un inmenso Mallorca de Gregorio Manzano ejecutó un 0-3 sin paliativos. En todo caso, el que fuese referencia durante muchos años en las alineaciones del Real Betis Balompié, tiene en su haber la Copa del Rey de Juveniles conquistada en el año 1990 cuando ya empezaba a despuntar en las categorías inferiores del Club de la Avenida de La Palmera.