El Estadio Benito Villamarín acogerá este domingo un enfrentamiento, que a tenor por el nombre de los participantes, bien podría tratarse de un partido de Primera División. Real Betis y Real Zaragoza miden sus fuerzas con el claro objetivo de regresar a la élite del fútbol español, escenario en el que se han visto la cara en multitud de ocasiones. Dos equipos que buscan recobrar el lugar perdido, la temporada pasada en el caso de los verdiblancos y hace dos años para el conjunto maño.

Será la séptima batalla entre verdiblancos y blanquiazules en la categoría de plata, siendo el último precedente la victoria bética por 3-1 del curso 1955/1956. El balance es demoledor a favor del Club helipolitano, vencedor en los seis partidos que ha disputado frente al Real Zaragoza como ocupante de la Segunda División. Una imbatibilidad que de ser mantenida este domingo, acercaría un poco más al equipo de Pepe Mel a la Liga BBVA.

Ya en Primera División, el saldo es de 40 enfrentamientos en terreno del Real Betis, con 23 triunfos para los locales, 11 empates y 6 victorias para el bando visitante. Datos que aunque no tengan repercusión en el momento actual, sirven para reflejar la dificultad histórica que ha supuesto para el Real Zaragoza sus visitas al estadio del Real Betis Balompié.

Además, varios de los últimos duelos entre béticos y maños han venido acompañados por noticias positivas para el bloque de las trece barras o han servido para completar una parte fundamental del objetivo a alcanzar. En la campaña 2012-2013, el Real Betis se imponía por 4-0 en la penúltima jornada del campeonato, tres puntos con los que se acariciaba el pasaporte para la UEFA Europa League que se obtendría una semana más tarde tras el empate contra la Levante UD (1-1). Como curiosidad, Rubén Castro y Jorge Molina anotaron dos de los goles con los que disfrutó la afición.

Un año antes, en el ejercicio ligiuero 2011-2013, el gran fútbol desplegado por el conjunto de Pepe Mel noqueó por 4-3 al Real Zaragoza en la quinta jornada. Una victoria que catapultó a los verdiblancos al liderato de la Primera División tan solo cuatro partidos después de su regreso a la máxima categoría, la última vez que los béticos se situaron en dicha posición. Finalmente, la temporada concluyó con una cómoda salvación con seis puntos sobre el descenso, permanencia para la que fue clave el excepcional arranque con 12 puntos en las primeras 4 jornadas.

No acaba ahí el repaso entre victorias contra el Real Zaragoza y su relación con temporadas de buen recuerdo reciente para el beticismo, ya que el 3-2 de la jornada 37 en la campaña 2004-2005 colocó al Real Betis en el trampolín europeo de la UEFA Champions League. Después de vencer con goles de Juanito, Oliveria y Assunçao, el punto obrado en Mallorca (1-1), clasificaba al Real Betis para disputar la máxima competición continental.

Asimismo, y pese a caer derrotado en el partido de ida de la Copa del Rey de la temporada 2010-2011, el Real Betis remontó en la vuelta dejó en el camino al Real Zaragoza en un brillante concurso copero que finalizaría cuando el FC Barcelona se cruzó en el camino bético, campaña que además significó el último ascenso del Club de las trece barras. 

Aunque aún reste un tramo importante de Liga para dilucidar los equipos que ascenderán a la Liga BBVA, un triunfo el domingo consolidaría el sólido liderato y aumentaría la nómina de ejemplos de las últimas temporadas en las que una victoria ante el Real Zaragoza ha conllevado noticias positivas, de mayor o menor envergadura, para los intereses verdiblancos.