El Betis Deportivo certificó en Pontevedra su regreso a la Primera Federación tras completar un auténtico partidazo. Otro más, como todos los del play-off, en los que el filial ha exhibido una madurez impropia de jugadores tan insultantemente jóvenes. La puesta en escena ya fue un aviso a navegantes: presión alta, control de la posesión, personalidad y ocasiones claras para abrir la lata. Yanis, Reina y Jesús Rodríguez tuvieron en sus botas el 1-0 en la primera mitad, de claro dominio verdiblanco a los ojos de más de 10.000 aficionados locales y medio centenar de béticos. Por su parte, el Pontevedra solo logró inquietar con algunos disparos lejanos y rechaces que no terminaron en nada.

La segunda parte siguió por los mismos derroteros, con un Betis Deportivo mejor plantado y buscando el gol que diese la tranquilidad. Y lo terminó encontrando en un contragolpe perfectamente liderado por Marcos Fernández y ejecutado por Jesús Rodríguez. Explosión de felicidad verdiblanca en Pasarón y también en todos los salones de los béticos que tenían puesta la televisión. Lejos de encerrarse para conservar la renta, los de Arzu tuvieron hasta dos opciones más de ampliar la renta antes de que el equipo local añadiera picante a los últimos compases del encuentro con un gol de Rufo. Y tocó sufrir, especialmente cuando Enrique fue expulsado por doble amarilla y el equipo gallego dispuso de una falta directa muy peligrosa que abortó Guilherme. Ya no hubo tiempo para más y el Betis Deportivo consumó un más que merecido ascenso después de una temporada muy larga en la que tuvo que superar múltiples adversidades, especialmente en el apartado de lesiones.

El Betis Deportivo salió de inicio con Guilherme, Ortiz, Visus, Mendy, Alcázar, Mateo, Sorroche, Reina, Souleymane, Jesús Rodríguez y Yanis. También jugaron Marcos Fernández, Andrés Caro, Enrique y Elyaz.