Carta de despedida de Rubi del Real Betis Balompié
El técnico catalán dedica estas sentidas líneas al club y su afición
He dejado de ser entrenador del Real Betis, y lo hago con dolor, decepción y fastidiado por todo lo ocurrido. Me despido, tras la decisión del Consejo de Administración, con esta explicación para todos los béticos, aclarando que aunque me hubiese gustado hacerlo en la misma sala de prensa donde fui presentado, las circunstancias sociales actuales no nos permiten mantener un cálido contacto. Vaya desde aquí mi recuerdo a todos los fallecidos durante esta pandemia y mi ánimo y apoyo a sus familiares y amigos.
Quiero ser agradecido con el club por todo este tiempo de convivencia, con todos sus empleados, enormes profesionales, con los jugadores, cuyo esfuerzo y dedicación diaria no nos ha traído mejor recompensa, o con los medios de comunicación, por el respeto demostrado. Pero sobre todo, me llevo en el recuerdo el desinteresado cariño de la afición. A ellos, especialmente, eterna gratitud. Nuestros seguidores han conseguido facilitar nuestra adaptación logrando hacernos sentir como uno más, como si lleváramos toda la vida en esta casa. Ellos nos han empapado de la cultura y de la historia verdiblanca.
Como equipo no hemos obtenido buenos resultados, siempre hemos ido a remolque o poniendo parches a situaciones que en ocasiones se volvían en contra cuando parecía que podía llegar la estabilidad. Entonces, el fútbol nos ofrecía guiones variados pero siempre muy crueles pese a lo demostrado sobre el terreno de juego. No busco excusas, solo expreso mi particular visión de cómo hemos sentido este periodo.
Aún con todo, hemos tenido el privilegio de vivir algunos momentos muy bonitos e incluso históricos como el hat-trick de Joaquín al Atlhetic Club en tan solo veinte minutos o la victoria al líder Real Madrid. De las cosas más mágicas que nos llevamos son los momentos y vivencias en el Benito Villamarin. A un servidor aún se le pone la piel de gallina al recordarlos, como el sonido del himno, los cánticos variados de la afición o como ruge el graderío cuando el Real Betis ataca o marca un gol.
Quería dejar constancia de que Sevilla es una ciudad maravillosa y el Real Betis una entidad que ha merecido, y mucho, la pena conocer. Me despido con todo el agradecimiento posible hacia el mundo bético, de alguien que se va enamorado de Andalucía y del Real Betis Balompié: "Mi viejo amigo, esta tarde volveré a estar contigo...".
Fdo.
Joan Francesc Ferrer 'Rubi'