Siete años después de la última comparecencia europea, el Estadio Benito Villamarín volvió a rugir al son de Europa. El EuroBetis volvía a disputar competición continental, en este caso, la UEFA Europa League, primera vez que lo hace con la actual denominación del torneo, conocido anteriormente como Copa de la UEFA. El público presente en el Benito Villamarín volvió a demostrar su fidelidad por los suyos, dotando a las gradas del coliseo verdiblanco de un ambiente espectacular durante todo el encuentro, palpándose desde el primer momento que era un día bonito para que el decorada brillase a gran altura. Como en cada capítulo brillante que la entidad ha escrito en Europa durante su centenaria historia, la noche resultó especial para los aficionados que se congregaron en Heliópolis para asistir al debut del Real Betis en la fase de grupos ante el Olympique Lyonnais (0-0). Por delante, aún quedan dos partidos para disputar en casa, el primero de ellos ante el Vitória de Guimaraes el próximo 24 de octubre. Ya el 12 de diciembre, los hombres de Mel recibirán al HNK Rijeka en el último envite del Grupo I de la Europa League, con el deseo de ver una trayectoria lo más longeva posible en la UEFA Europa League.

Hasta la próxima cita europea, el bloque bético disputa el domingo 22 su siguiente partido de liga, ante el Granada CF. En un encuentro importante para seguir escalando posiciones en la tabla clasificatoria, la escuadra heliopolitana jugará como local a partir de las 12:00 horas, lo que sin duda volverá ser otra buena oportunidad de repetir en los prolegómenos del encuentro la espectacular atmósfera que se vivió en la noche de ayer. Para ello, el Club ha lanzo la iniciativa 'Día del niño Bético', por la cual cada socio podrá adquirir dos entradas para los más pequeños a cinco euros cada una.