Existen muchas voces que dicen que el fútbol es un deporte de sensaciones, de instantes, de momentos. Si hay un momento para los cuatro protagonistas de esta historia, ese es la temporada 2016/2017. Hace dos años, Fabián, Álex Alegría, Rafa Navarro y José Carlos compartieron vestuario mientras militaban en el Betis B. Hoy, trabajan codo a codo con los miembros de la plantilla del primer equipo del Real Betis Balompié, al igual que otros componentes salidos de las últimas generaciones de la cantera verdiblanca, como son Dani Ceballos y Álex Martínez.

Pese a ser el segundo más joven de los cuatro, Fabián es el único que ya ha jugado en primera División, por lo que ha podido dar a sus compañeros “unos cuantos consejos. Este año tengo un poco más de experiencia. La temporada pasada estuve disfrutando mucho con los jugadores del equipo. Ahora que los tres han llegado, estoy muy contento de estar otro año jugando con ellos”, explica. Siguiendo sus pasos, este año se incorpora Rafa Navarro al equipo senior: “Estoy muy contento de formar parte de la primera plantilla. Para mí es un sueño. Quiero animar a todos los de la cantera, porque con trabajo y sacrificio pueden llegar hasta donde he llegado yo”.

La situación del delantero placentino Álex Alegría es diferente. El ‘19’ del Real Betis salió cedido durante la pasada campaña al CD Numancia, experiencia que le ha sido muy útil “para seguir creciendo como futbolista. Me ha servido sobre todo para saber que puedo llegar a jugar en Primera División y que tengo mucha confianza en mí”. En su vuelta a Heliópolis, Alegría lucirá dorsal del primer equipo, portando un número que ha sido muy especial en los últimos años en el Benito Villamarín. “Nada más llegar me pusieron el ‘19’ y es un dorsal al que le tengo cariño porque lo ha llevado Jorge Molina. Él lo ha demostrado todo en este Club y es un placer llevar ese dorsal”. Además, han comparado sus características a las del que fue capitán del Real Betis, aunque Álex Alegría creo que tienen perfiles diferentes: “Él era más de ir en profundidad y yo soy más de aguantarla y un poco más rematador”.

Seguridad en sí mismo tampoco le falta a José Carlos, pese a que este año alternará el primer equipo con el filial verdiblanco, y es el único que no tiene dorsal del primer plantel. “Es una satisfacción poder estar con el primer equipo y, cuando no pueda ayudarles a ellos, estaré para ayudar también al Betis B”, comenta el central de Paradas, el más joven de este cuarteto.

Todos ellos cuentan, además, con la confianza del entrenador del primer equipo, Gustavo Poyet, y el director deportivo, Miguel Torrecilla. “Para un jugador de la cantera es algo muy alegre de escuchar. A todo el mundo le gusta oír cosas buenas de uno mismo. Si el míster y el director deportivo hablan bien de ti, pues mucho mejor”, expone José Carlos. De hecho, el defensa fue convocado para el primer partido de Liga, nada menos que en el estadio del FC Barcelona: “Además de que entran en cualquier convocatoria es una alegría, si es en el Camp Nou mucho mejor. Aunque el resultado no fuera el que tenía que ser, fue una alegría muy grande”. Esa confianza supuso para Fabián entrar desde el inicio en el once para disputar el primer encuentro liguero en casa. “Es una gran satisfacción para mí que en el primer partido en el Benito Villamarín pudiera jugar como titular, estoy muy contento”, asevera.

No obstante, todos son conscientes de que llegar no garantiza quedarse con  un puesto, y más aún en una plantilla con tanta competencia como la que presenta el equipo este año. “En una plantilla siempre es bueno tener competencia para que ninguno se relaje. Si los nuevos vienen a ayudar, mucho mejor para el equipo. Que juegue el que se lo merezca o el que el técnico crea que está mejor”, comenta Fabián. En líneas similares se expresa Álex Alegría: “De momento no he contado con minutos pero la temporada es muy larga. Creo que con esfuerzo y con trabajo llegarán los minutos”.

Nadie les ha regalado nada, no han llegado hasta este punto por casualidad. Saben perfectamente que llegar no significa quedarse, que hay que seguir sacrificándose para así seguir creciendo. Así lo demuestra Rafa Navarro. El joven lateral lo tiene claro: “El míster me dice que esté tranquilo, que siga igual que como lo estaba haciendo en el filial y que trabaje mucho. Creo que el trabajo no se negocia. Eso no puede faltar nunca”.