Once partidos sin perder. Se dice pronto. Pero son ya más de tres meses sin morder el polvo. La última derrota fue justo en la cima del Tourmalet, ante el FC Barcelona, cuando arrancaba el mes de diciembre. No había llegado aún el invierno.

Desde entonces, y utilizando un argot más propio del ciclismo, el equipo respondió en el descenso del Tourmalet y también en el siempre complicado llano ante equipos de la zona media alta de la tabla como el Madrid CFF, el Levante, la Real Sociedad o el Rayo, entre muchos otros.

Ahora toca subir de nuevo el puerto. Un Tourmalet de cuatro partidos: Athletic, Valencia, Atlético de Madrid y Barcelona, con una primera parada en Lezama. Ganas, muchas; miedo, ninguno. Porque este Betis ha demostrado en este tramo de competición capacidad sobrada para competir ante cualquiera. Y más cuando el rival de mañana, de tremendo potencial, únicamente se encuentra a un punto de las verdiblancas. Cuartas contra quintas. Y con la tercera plaza también a un punto. Sobran las palabras.

El precedente de la primera vuelta, pese a la derrota, también invita al optimismo. Porque el Betis Féminas tuteó al Athletic. El 1-2 fue un castigo excesivo para un equipo que acabó encerrando a su rival. No son mejores los números del pasado año, con dos derrotas en sendos partidos. Pero derrotas que llegaron en el tiempo de añadido en dos excepcionales partidos de las chicas de María Pry.

En el plano deportivo, la entrenadora bética no podrá contar con Cristina Muñoz. La central, que marcó su primer gol en Primera el pasado año en Lezama, se perderá el duelo tras su operación en el pie del pasado viernes. El resto está disponible.

El duelo, correspondiente a la 23ª jornada de la Liga Femenina Iberdrola, arrancará a las 10:45 horas, será dirigido por la árbitra del comité madrileño Elena Contreras Patiño y se podrá ver en directo por beIN LaLiga.