Virginia García Montilla, más conocida en el mundillo del fútbol femenino como Virgy, se convirtió ayer en el segundo refuerzo del Real Betis Féminas. La jugadora cordobesa se incorpora al proyecto bético, que pretende seguir creciendo el próximo año tras una primera temporada notable.

“La verdad es que tengo muchas ganas y mucha ilusión. Estoy muy agradecida por la confianza que me transmite el club y tengo muchas ganas por empezar”, indicó la de Mesas de Guadalora, que reencontrará con antiguas compañeras. Ese factor, sin duda, ha contribuido a la llegada de la ex del Granadilla y el Sporting de Huelva a la entidad verdiblanca. “Era un punto muy a favor del Betis. Soy una persona muy familiar, que me gusta estar bien en el sitio. Mis amigas me han hablado del buen trato del club hacia el equipo femenino. Conozco al cuerpo técnico. Tuve la suerte de jugar con María Pry y Ana Llamas y eso es muy grato”, continuó.

Además, Virgy llega a un equipo en crecimiento y que ha hecho las cosas muy bien en su primera temporada en la elite. “El primer año en la Liga Iberdrola ha sido espectacular. Nadie se imaginaba esa soltura con la que las jugadoras han debutado en Primera División. Han conseguido salvarse con cuatro jornadas de antelación y, además, todos hemos visto el buen fútbol que el equipo ha hecho”, agregó.

La mediapunta de Mesas de Guadalora aportará desborde, calidad y gol. Pero también veteranía y experiencia en la máxima categoría. “Mi objetivo es dar lo máximo, intentar aportar lo que pueda. Llevo varios años en Primera División. Creo que aportaré madurez al equipo y en todo lo que pueda ayudar al equipo, lo haré”, señaló.

¿Y cómo se define Virgy en el terreno de juego? “Virgy es una jugadora ofensiva, que siempre ha jugado por detrás de la delantera, aunque también me puedo adaptar a las bandas. Me gusta asistir, aunque también he hecho goles. Soy más asistente que goleadora”, concluía.